Dicen que en la escuela primaria Ruffo Figueroa de Guillermo Prieto y Nabor Ojeda, de Iguala Guerrero; la directora María Eugenia Hernández Gómez, movió su criticada influencia para colocar a su esposo como responsable de un grupo que no pudo atender una profesora, por asuntos familiares. Además ha puesto a su hija que estudia en la tarde en el Vasconcelos, para que asista a una profesora y se rumora que recibe $100.00 diarios.
Adicional a esto, hay descontento por que no se exhibe la administración del dinero que se recauda por actividades de padres de familia y profesores. Agregando también los apoyos económicos que se depositan en una cuenta bancaria personal de la directora.
Y que si la directora requiere de dinero para necesidades de la escuela o personales, pues entre otras estrategias, le pide dinero a los maestros que conforman Acción Social y sin justificar propiamente el gasto.
Por cierto; ¿A dónde va a dar el $1.00 que le piden a los alumnos para usar una computadora dos veces a la semana?
Haber mi querida calculadora; si por cada alumno son $2.00 a la semana y consideramos que sean unos 300 alumnos, me da $600.00 por cada semana.
Cuentan que la secretaria se siente subdirectora y se da aires de grandeza. -la pulga sobre el elefante, ya saben- lo cierto es que hay un tanque agrietado, baños que necesitan ser reparados, postes para sostener un techo mal instalados y que entregó una empresa refresquera a cambio de tener exclusividad de sus productos -o sea la coca, quién más-
Y a fin de cuentas el esposo de la directora tuvo que ser removido por instrucciones de la supervisora.
Ánimo con su reducido grupo de alumnos del Programa de Tiempo Completo; derivado de incumplimiento de autoridades.
*Eso se rumora...
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