Con la llegada de un nuevo sexenio en el gobierno mexicano, los ciudadanos, sobre todos los más desprotegidos, deberíamos ser afortunados y vivir en mejor situación socioeconómica por cada una de los programas que implementa el presidente en turno. Desde Miguel de la Madrid con sus “Pactos y Alianzas”, Salinas de Gortari con su Programa Nacional de “Solidaridad” (PRONASOL), Zedillo con “Progresa” y “Ver bien para aprender mejor”. En seguida llega el bototas, (ups) perdón, Vicente Fox y su “Oportunidades”. Ahora el presidente Calderón nos trae “Para vivir mejor” son parte de sus estrategias para demostrar que con sus programas nacionales, ellos si gobiernan para todos.
Sin embargo nada nos demuestra a los mexicanos que en realidad sean programas eficientes. ¿Alguien recuerda los comerciales en tiempos del orejotas (ups y recontra ups) perdón, de Carlos Salinas de Gortari? Muchos de ellos referían la grandeza del programa “Solidaridad” y llama mi atención uno en particular en el que ambientado con una hermosa melodía, apreciábamos a dos trabajadores indígenas hablando en dialecto desde su taller equipado con la mayor tecnología gracias a Solidaridad, y uno le entendía al comercial porque naturalmente que estaba subtitulado, “daban ganas de llorar por tanta felicidad que nos traía “Solidaridad” hasta nos publicaban en periódicos del extranjero “Solidarity in México” Y por si fuera poco, en diciembre de 1992, se firmó el TLC… cuántos sueños y esperanzas perdidas…
En contraste con el derroche de ingenio y planeación de tantos sexenios, pareciera como si en la actualidad todavía estuvieran improvisando en cómo gobernar a la nación. Los edificios y estructuras de gobierno, están fracturados y el gobierno insiste en pintar bellamente la fachada.
En el año 2010, los derechohabientes de Hospitales y clínicas de salud del gobierno, sobre todo del IMSS, continúan quejándose por el pésimo servicio y atención médica que reciben en dichos centros de salud. Hace casi 2 años, en el puerto de Acapulco, fue noticia el caso de una joven mujer embarazada, que a falta de camas, perdió a su bebé cayendo éste al piso frente a la mirada atónita del personal del hospital general y pacientes que esperaban su turno.
Las breves historias de una profesora de conocido centro educativo de esta ciudad, y de una ama de casa, nos ejemplifica que también en el IMSS de Iguala, saben hacer de las suyas. A la profesora la operaron de una hernia y la anestesia nunca hizo su efecto requerido, y a pesar de habérsele informado al cirujano, el galeno nada hizo por asegurarse que todo marchara bien, posterior a esto, la joven profesora fue dada de alta de inmediato, ya que le argumentaron que no había camas disponibles. A la ama de casa, le dieron cita para su ultrasonido hasta junio de este año, porque tenían saturado de ultrasonidos. El caso es que para ese entonces, el bebé ya tendría 10 meses, y con la bendición de Dios (no del IMSS) para ese entonces el bebé ya contaría con un mes de nacido. No se qué te ha hecho el IMSS –me dijo una doctora- pero quiero que sepas que este es el mejor lugar para cuidar de la maternidad, incluso nuestro distintivo “es la Madre con su niño” –puntualizó-. En mi caso particular, hace años tuve un accidente con la motocicleta, después de varias semanas no podía flexionar mi rodilla izquierda y los médicos familiares solo me recetaban “diclofenaco y naproxeno” y no quisieron autorizar a que viera al traumatólogo, así que tuve que ir con un particular; con unas inyecciones, rehabilitación, vitaminas y demás (menos diclofenaco y naproxeno) quedé otra vez casi como nuevo. Después de esta y otras experiencias familiares, cuando llegó el momento en que mi esposa se embarazó en dos ocasiones, aún y cuando no estamos en condiciones económicas estables y teniendo la fortuna de ser derechohabiente del IMSS, se atendió en ambas circunstancias con médicos particulares. Y no confío en su sistema como para dejar la salud de mis bebés en sus manos.
En breve es de suponerse que todo sea diferente, de otra manera es como si el gobierno nos diera a entender que su programa “Para vivir mejor” que concentra todas las acciones de gobierno, encausándolas hacia un mismo objetivo, “El Desarrollo humano sustentable” es solo otro disfraz más que se le pone a la fachada de la estructura deteriorada al punto del colapso, “renovarse o morir”.
* Publicado en el Diario de Iguala
Atte. Andrés Ortiz Pantaleón
esbozos2911@hotmail.com
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